Atravesaste alguna situación en tu vida que te dejó girando en círculos de forma indefinida y te das cuenta de que necesitás una salida, pero...
¿Por dónde empezar?
Por recuperar el sentido de tu vida.
Hasta que no logres comprender por qué y para qué te ocurrieron estos sucesos, te será imposible poder seguir adelante con paz y armonía en tu corazón.
Cuando recuperes el sentido en tu vida…
-Volverás a disfrutar de despertar cada día
-Tendrás mayor energía vital y entusiasmo
-Expandirás tu salud física y mental
-Mejorarás tus relaciones personales
-Crearás nuevos proyectos que te hagan sentir felicidad y plenitud genuinas
Ante esa situación puedes elegir dos caminos:
1) Ir hacia afuera: seguir tratando de llenar tus vacíos internos con chismes, comida, ropa, viajes, cirugías, relaciones esporádicas, entretenimiento y otras distracciones que harán que tu vacío se expanda.
2) Ir hacia adentro: animarte a viajar dentro tuyo, reconociendo tus heridas internas para poder comenzar a sanarlas hasta recuperar el sentido de tu vida.
Mi vida puede resumirse en que “me pasé la vida esperando que pasaran cosas” y con ese pensamiento, lo único que se me pasó fue la vida…
Me casé a los 22, tuve dos hijos y a los 30 me divorcié.
A partir de ahí, comenzó una época en la que me sentía muy mal y solo me tranquilizaba pensar que la felicidad iba a llegar cuando: mis hijos crecieran, consiguiera un trabajo, pudiera comprar una casa, tuviera una nueva pareja, tuviera más dinero, etc, etc.
Durante mucho tiempo, viví para trabajar.
Soy Andy Novo, y sé lo que es perder el rumbo y el sentido en la vida...
Hasta que un día me echaron de una manera no grata, al mismo tiempo que estaba atravesando la muerte de mis padres. Entré en crisis, perdí todas mis referencias y caí en un bucle de negatividad y conflicto que terminó por estancarme.
Casi llegando a mis 50, me di cuenta de que, aunque había logrado muchas cosas que me había propuesto, había caído en un vacío existencial, como si estuviera adentro de un agujero negro.
Después de un proceso personal donde toqué fondo y la pasé muy mal, decidí comenzar un proceso interno que me hizo comenzar a estudiar diferentes técnicas de sanación para utilizar en mí:
- Coach Ontológico Sistémico
- Biodecodificación
- Constelaciones familiares y organizacionales
- Sanación Bioenergética y Cuántica
- Barras Access
Ese proceso fue tan revelador y sanador que terminé especializándome en todas esas herramientas para acompañar a personas que, como yo, perdían mucho tiempo de su vida sufriendo por no enfrentar los cambios que trae la vida y dejarlos para más adelante.
Hoy, a varios años de haber iniciado este camino de autoconocimiento, quiero ayudarte a que seas parte de esta comunidad de personas adultas que lograron cambiar radicalmente su vida después de los 50.
Te propongo no dejar ese cambio interno para “después”, porque ese después ya llegó…
Recuperá el sentido en tu vida
ESTO ES LO QUE VAS A LOGRAR EN 75 DÍAS
Libertad, a través de tu memoria emocional:
Vas a darte cuenta de cuáles son esos recuerdos inconscientes que están determinando tu vida. Vas a descubrir emociones y patrones mentales muy profundos, para poder desaprenderlos y resignificarlos.
Sanación, a través de la interpretación simbólica y huellas epigenéticas:
Vamos a prestar mucha atención a las enfermedades o síntomas como un mensaje simbólico del cuerpo, una expresión de conflictos emocionales o espirituales no resueltos. No sólo en tu cuerpo, sino también, analizando los eventos repetitivos de la vida y del árbol genealógico.
Equilibrio energético, a través de prácticas:
Con la información recolectada, nos dedicaremos a implementar ejercicios que logren alinear tu energía mental, física y espiritual para que puedas experimentar una revitalización única, que te permita sentirte como en tus mejores años de juventud.
Ampliar tu mirada de la vida, a través de la metafísica:
Vas a integrar conceptos nuevos, que van a provocar que tu mirada sobre el mundo, las relaciones, el tiempo, la vida y la muerte, cambie totalmente para siempre.
Resignificar tu identidad, a través de un trabajo espiritual:
Luego de este trabajo registrado, haremos una inducción poderosa que te permitirá restaurar tu verdadera identidad, rompiendo las múltiples carcasas del ego y llegando a la profundidad de tu ser.
Definir tu misión y propósito, a través de metas concretas:
Desde tu verdadera identidad, diseñaremos el camino de encuentro hacia tus nuevas metas, alineadas con tu nuevo propósito de vida, para que tengas un paso a paso claro que puedas seguir.
Manifestar tu nueva vida, a través de todo mi programa:
Contarás con mi apoyo para poder materializar tus nuevos objetivos, junto a otras personas del mundo que están en la misma misión.
Cambiar el foco de atención del afuera hacia adentro:
Logrando así un cambio de paradigma que te permita amarte profundamente y ponerte en primer lugar para luego poder amar a otros
Ellos son personas mayores de 50 años que ya lograron mejorar su calidad de vida gracias a mi Programa La Salida es Para Adentro
Llegó a mí cuando sus hijos se habían ido de su casa.
Ella sentía que su vida ya había pasado, estaba atrapada en la melancolía.
Gracias al método APS, logramos encontrar un nuevo propósito con el que pudo experimentar diferentes intereses, dándose el tiempo necesario, confiando en el proceso y trabajando en ella misma, hasta lograrlo.
Así comenzó a disfrutar de un nuevo momento de su vida adulta.
Stella
Llegó a mí al momento de jubilarse después de trabajar 38 años en la misma empresa. Al llegar a mi consulta repetía "me quede sin sentido en la vida. La empresa era mi familia”.
Gracias a mi método APS, él pudo darse cuenta de todo lo que había depositado emocionalmente en el trabajo para tapar lo que le faltaba en su hogar. Decidió comenzar una nueva vida, encontró una nueva pareja y volvió a jugar al tenis, deporte que practicaba de adolescente. También se dedicó algunas horas a dar consultorías a grandes empresas, dado su expertise en el tema.
Alfredo
Llegó al programa habiendo perdido a su mamá hacía poco tiempo.
Ella la había cuidado con devoción durante muchos años, resignando parte de su propia existencia. Por eso, no sólo había perdido a su mamá, sino también las ganas de vivir.
Participó de todos los encuentros grupales, hizo todas las tareas y se dedicó con mucho afán a la tarea de salir adelante, aunque le pesaba.
Gracias a mi programa logró, antes de que el programa terminara, hacer un click donde entendió que aún tenía mucho por hacer y que la mejor forma de honrar a su madre era viviendo y siendo feliz.
Mónica